Durante el embarazo, los requerimientos nutricionales aumentan de manera significativa para acompañar el crecimiento del feto, el desarrollo de la placenta y los cambios fisiológicos maternos. Entre los nutrientes esenciales, el hierro ocupa un lugar central, ya que participa en la síntesis de hemoglobina, el transporte de oxígeno y múltiples procesos metabólicos críticos.
¿Por qué disminuyen los niveles de hierro en el embarazo?
Es habitual observar un descenso en las concentraciones de hierro, especialmente a partir del segundo trimestre de gestación. Este fenómeno se debe al aumento del volumen plasmático y a la mayor demanda de hierro por parte del feto y la placenta.
Si bien este descenso forma parte de los cambios fisiológicos esperables, debe ser compensado y controlado para evitar que evolucione hacia una anemia por deficiencia de hierro.
La importancia del control profesional
La anemia por déficit de hierro es la carencia nutricional más frecuente durante el embarazo. Su presencia aumenta el riesgo perinatal tanto para la madre como para el recién nacido y puede generar complicaciones a corto y largo plazo:
- Mayor probabilidad de parto prematuro
- Bajo peso al nacer
- Afecciones del crecimiento y desarrollo fetal
- Mayor susceptibilidad a enfermedades infecciosas
- Alteraciones en el desarrollo neurológico y en la formación del tubo neural
- Incremento de la morbilidad y mortalidad materno-infantil
Por estas razones, el seguimiento desde los equipos de salud es fundamental para la detección temprana y el abordaje adecuado.
Rol de la alimentación y la suplementación
El cuidado nutricional durante el embarazo es una herramienta esencial para mantener niveles adecuados de hemoglobina y reservas de hierro.
Se recomienda:
- Aumentar la ingesta de hierro y ácido fólico a través de alimentos ricos en estos nutrientes.
- Evaluar la necesidad de suplementación con hierro, especialmente en personas con antecedentes de anemia, embarazos múltiples o condiciones que aumenten la demanda.
La evidencia científica demuestra que la suplementación con hierro en embarazadas reduce los riesgos de prematuridad, bajo peso al nacer y complicaciones vinculadas al crecimiento y desarrollo fetal.
Acompañamiento integral desde los equipos de salud
Las obstétricas/os y Lic. en obstricia cumplen un rol clave en la educación, el seguimiento e intervención oportuna. Detectar precozmente los signos de déficit, promover hábitos alimentarios adecuados y garantizar el acceso a los controles de salud que permiten prevenir complicaciones que pueden tener repercusiones incluso intergeneracionales.
En el COPBA, reforzamos la importancia de brindar una atención integral y basada en la mejor evidencia disponible, acompañando a cada persona gestante en un proceso seguro y saludable.
