La esferodinamia es una técnica de trabajo corporal que utiliza esferas de distintos tamaños teniendo como objetivo la reeducación y reorganización postural. Durante la gestación el cuerpo de la mujer es interpelado constantemente, y la esfera cumple el rol de integrar el cuerpo de la embarazada. Conocé los beneficios y las posibilidades de esta actividad.
“La Esferodinamia es una técnica de trabajo corporal para entrenar la propiocepción, es decir, permite la consciencia de la postura corporal con respecto al medio que nos rodea, y de este modo mejora la respiración y el movimiento del cuerpo, siendo la esfera el elemento facilitador” resume la Licenciada en obstetricia Cynthia Sánchez matriculada en el Distrito V del Colegio de Obstétricas de la provincia de Buenos Aires, profesora de Yoga e instructora de Esferovital.
El embarazo genera en la mujer cambios corporales, manifestados muchas veces con molestia o dolor, o con una gran necesidad de adaptarse de manera dinámica. En este sentido, la licenciada resalta que “es importante, desde momentos tempranos de la gestación, acercar a la mujer a una práctica facilitadora, pedagógica y lúdica de sí misma para transformar esta sensación de temor en autoconfianza, conocimiento y fortalecimiento sobre su propio cuerpo y psiquis”.
La esfera cumple el rol de integrar el cuerpo de la embarazada permitiéndole conocer y alcanzar nuevos movimientos, maneras de respirar y relajar. Además, “el fisiobalon o esfera es un facilitador del vínculo madre-hijo” explica la obstétrica, y agrega que en el desarrollo de la actividad se utilizan diferentes pelotas según los objetivos de la clase, permitiendo, de este modo, enseñar a la mujer sobre estructuras anatómicas que recién en esta etapa toman relevancia en su cuerpo, como la pelvis, útero, articulaciones sacroilíacas, abdominales y sostén.
Por otro lado, permite enseñar dinámica de los lugares y explorar los espacios que el bebé atravesará durante su nacimiento, también, adapta la respiración a la correcta oxigenación que van necesitando madre-hijo, y eleva el umbral del dolor entendiendo su función fisiológica, señala la Lic. Sánchez. “En lo personal creo que el trabajo grupal con mujeres gestantes y esferas va formando una red de madres que se sostienen, y van descubriendo con las esferas sus nuevos cuerpos, sus fortalezas, y genera una unidad sutil que las mantiene comunicadas en el puerperio” concluye la Obstétrica.
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Cabe señalar que en provincia de Buenos Aires, a través de la Ley N° 13509 que regula los requisitos mínimos para el dictado de Cursos de Preparación Integral para la Maternidad y de Psicoprofilaxis, y la Ley N°11745 de Colegialización del Colegio de Obstétricas, es la Licenciada en Obstetricia u Obstétrica la profesional que debe dictar y coordinar las actividades de preparación para la maternidad, ya que sus incumbencias y funciones profesionales le aportan los conocimiento integrales y necesarios para dicha función.
Además, la Ley de Colegialización establece en el artículo 15 inciso 25 que el Colegio debe “centralizar el registro de Cursos de Preparación Integral para la Maternidad y de Psicoprofilaxis que se dicten en el territorio de la Provincia de Buenos Aires con expresa indicación del profesional dictante, número de matrícula y lugar de desarrollo del mismo”.
Es decir que, las obstétricas son reconocidas en provincia de Buenos Aires como las profesionales idóneas para llevar a cabo la coordinación y el dictado de los Cursos de Preparación Integral para la Maternidad, siendo este un alcance propio del título.
