Alerta en época invernal: el monóxido de carbono, un peligro silencioso para los bebés

En invierno los riesgos de intoxicación por monóxido de carbono (CO) aumentan. Por eso desde el Colegio de Obstétricas de la Provincia de Buenos Aires consideramos fundamental alertar sobre este riesgo, particularmente en bebés y niños pequeños, quienes son especialmente vulnerables a los efectos de este gas tóxico e invisible.

El monóxido de carbono no tiene color, olor ni sabor. Por eso se lo conoce como «el asesino silencioso». Se produce por la combustión incompleta de materiales como gas, madera, carbón o kerosene, y su inhalación puede resultar letal en pocos minutos si no se detecta a tiempo.

Síntomas en bebés: una alerta difícil de detectar 

En lactantes y niños pequeños, los signos de intoxicación pueden confundirse fácilmente con otras enfermedades comunes. Algunos de los síntomas pueden incluir:

  • Somnolencia excesiva o dificultad para despertar
  • Irritabilidad o llanto persistente
  • Vómitos
  • Piel pálida o con tono azulado

Es importante estar atentos y actuar rápidamente si se sospecha una intoxicación.

¿Qué hacer si se sospecha intoxicación por CO?

 

  • Ventilar inmediatamente el ambiente: abrir puertas y ventanas.
  • Retirar al bebé del lugar contaminado y llevarlo a un área con aire fresco.
  • Buscar atención médica urgente: llamar al 107 o acudir al centro de salud más cercano.

La prevención salva vidas

Para evitar tragedias, especialmente durante el invierno, recomendamos tomar las siguientes medidas preventivas:

  • Instalá detectores de monóxido de carbono: colocá detectores en ambientes donde haya estufas, calefones, termotanques o cocinas a gas.
  • Hacé revisar periódicamente los artefactos a gas: Asegurate de que estén en buen estado y que la combustión sea adecuada. Solo un gasista matriculado puede realizar estas tareas.
  • No uses estufas a gas sin salida al exterior ni braseros dentro de espacios cerrados. Tampoco generadores a combustión en ambientes interiores.
  • Permití siempre la ventilación de los ambientes: una pequeña entrada de aire puede marcar la diferencia.

Desde COPBA trabajamos por la salud integral materno-infantil. La prevención comienza por la información.

spot_img